La fundación Aland junto a la asociación AlVelAl han participado en la feria Terracultura, presentando los avances y resultados del Grupo Operativo Al-Aqua, un proyecto diseñado para mejorar la resiliencia de los cultivos de almendro en zonas semiáridas frente al estrés hídrico, un desafío cada vez más acuciante debido al cambio climático.

Durante las jornadas, se ha generado un notable interés entre asistentes de distintos ámbitos: desde la administración pública y empresas agrícolas hasta agricultores locales. La feria ha servido de escaparate para mostrar no solo productos innovadores, sino también maquinaria y nuevas técnicas aplicadas en el sector agroalimentario.

Miguel Ángel Gómez Tenorio, director técnico de agricultura de AlVelAl, ha explicado en detalle el objetivo del proyecto: «Al-Aqua surge como respuesta a la creciente necesidad de implementar innovaciones biotecnológicas para hacer más eficientes los cultivos de almendro en secano. Nos enfrentamos a escenarios donde las lluvias son cada vez más escasas y torrenciales, lo que nos obliga a adaptarnos rápidamente.»

El proyecto, financiado por la Junta de Andalucía a través de fondos europeos, cuenta con un presupuesto de 281.544,52 euros y se desarrolla en colaboración con Tecnova, Crisara, Aland y AlVelAl.

Entre las principales técnicas presentadas destacan la mejora de la estructura y capacidad de retención de agua del suelo mediante enmiendas orgánicas, la instalación de cubiertas vegetales, la creación de zanjas de infiltración y el uso experimental de materiales innovadores como la lana de oveja para acolchado y retención de humedad. Además, se está trabajando con productos microbiológicos para potenciar la biodisponibilidad de nutrientes en los cultivos.

La feria también ha sido el escenario para mostrar cómo el proyecto apuesta por una agricultura más sostenible y regenerativa, explorando soluciones que, además de mejorar la productividad, regeneran el suelo y fortalecen los ecosistemas agrícolas.

El equipo de Al-Aqua ya planea seguir compartiendo los resultados del proyecto en otros encuentros, como en la próxima edición de Infoagro, donde continuarán dando visibilidad a estas innovaciones.

Sin duda, la participación en Terracultura ha supuesto un importante altavoz para este proyecto que, aunque en su fase final de ejecución, ya está dejando un impacto positivo y promete seguir avanzando en la mejora de la agricultura en entornos áridos.